Multideporte

Tal y como su nombre indica, la Escuela Multideportiva de Pedreguer combina varios deportes. Constituye el primer escalón de la enseñanza deportiva y se recomienda a todo el mundo con el fin de iniciarse en la práctica deportiva (está especialmente indicada para niños de entre 6 y 7 años).

El conocimiento de un amplio abanico de posibilidades deportivas permite una buena elección posterior; contrariamente, si desconocemos un deporte no seremos capaces de saber si nos gusta o no practicarlo. Muchas veces, a menudo con demasiada frecuencia, escogemos un deporte por las características preconcebidas que tenemos (derivadas de factores externos como la televisión, la prensa, los amigos ...). Con estas circunstancias, es habitual encontrarnos casos de rechazo al deporte practicado en niños que se han visto obligados a realizar el deporte que los padres han elegido para ellos. Y este hecho, no es necesario decirlo, repercute negativamente en su visión global del deporte y deriva en un menosprecio a cualquier práctica deportiva. Es decir, que conviene no coaccionar la elección de un deporte a los hijos por el simple hecho del prestigio social o porque a un mismo le gusta. No todo el mundo tiene las mismas preferencias.

Es por este motivo que la Escuela Multideportiva tiene un papel fundamental en la toma de conciencia deportiva de los más pequeños. Mediante el juego se dan a conocer muchos deportes y se practican habilidades a lo largo del curso. El objetivo de la escuela es trabajar las habilidades motrices básicas, fomentar la participación activa en un grupo, inculcar valores de respeto al resto de compañeros ya uno mismo, integrar socialmente todos los alumnos, concienciar que el deporte es un hábito saludable , hacer ver el deporte como una herramienta de diversión ... en definitiva, la adquisición de aspectos positivos.

Se trata de un proceso que contempla las primeras experiencias y sensaciones referidas al deporte, al tiempo que contribuye al correcto crecimiento de los alumnos. Es un espacio de interacción social que estimula a los niños. La convergencia de aspectos lúdicos y deportivos tiene una función socializadora fundamental ya que los niños y niñas aprenden a seguir las reglas del juego, así como también favorece la adquisición de actitudes solidarias y tolerantes con el resto de compañeros.